La preparación es clave para viajar largas distancias con un gato. No puede simplemente meter al animal rápidamente en un transportín para mascotas como lo haría si estuviera conduciendo por la ciudad. Un felino asustadizo en un viaje largo en automóvil o avión puede hacer que sus viajes sean más estresantes durante y después de la llegada. La ASPCA recomienda seguir la rutina de su gato mientras viaja, desde los horarios de alimentación hasta las pausas para ir al baño o el tiempo de juego.